En la Biblia dice que:
Todo tiene su tiempo bajo los cielos.
Tiempo de nacer...y tiempo de morir.
Tiempo de plantar...y tiempo de recoger.
Pues aquí me tenéis...más de 5 meses esperando este momento.
Mes de Marzo.
Empiezan a salir los primeros brotes de las viñas.
Unos retoños entre unas parras que parecen estar secas.
Pero nada más lejos de la realidad.
Como muchas cosas más...Aunque solo sea en el interior, están llenas de vida.
Estamos en Abril...y continúan creciendo poco a poco.
Llega el mes de Mayo...y hay una explosión de verdor en las viñas.
Ahora, no solo se han llenado de pequeñas ramas y de verdes hojas...sino que empieza a aparecer lo que serán racimos de uvas.
Las altas temperaturas del mes de Junio han hecho posible que se facilite el crecimiento del racimo.
Ya estamos a primeros de Julio.
Y en solo tres semanas más...el racimo de uvas empieza a tomar color.
Estamos a finales de Julio.
Y...¡Toma ya!
Solo dos semanas más ha necesitado para convertirse en unas uvas duces y sabrosas.
Así que...antes de que llegue la deseada vendimia...voy a coger el racimo que con tanto esmero, paciencia y dedicación, he estado esperándolo como su fuera mi hijo.
No sea que venga un "espabilao" y se lo lleve...jajajaja.
Un ocho alrededor de Zamora
-
Hemos aprovechado la festividad del Día del Trabajo para relajar nuestras
mentes y trabajar nuestras piernas, es decir, que hemos salido en bici.
Como un...
Hace 17 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Envía tus comentarios: