El tiempo bikesteros@movistar.es - Parking Carrefour - Granollers

23 ago 2018

LA MOLINA-CAPDEVÀNOL...2018

Una ruta también de las clásicas de los Bikesteros que son de las más espectaculares que hemos hecho.



Comenzamos en el año 2011 y desde entonces vamos de vez en cuando. No tantas veces como quisiéramos. 


Salimos desde la estación de Granollers-Canovellas...tempranito que el tren no espera a nadie.


Y en un par de horas ya estábamos en la estación de la Molina.



Después de hacer un poco el "troglodita" con los dinosaurios del parque...


Comenzamos nuestra subida hasta el telesilla de Rocblanc.



Y una mirada hacia arriba... para ver lo que nos esperaba...uf...



Pero como quien no quiere la cosa y poniendo calentitas nuestra piernas, llegamos arriba del telesilla.


Y por aquellas cosas maravillosas de la vida...nos encontramos que han puesto un bareto....jajajajaja.



Y claro...un Bikestero auténtico no le dice nunca que no a una cerveza fría. 



Y más... a 2.200 metro de altura.

Yo creo...que fue en ese preciso momento que empezaron a flaquearnos las piernas...jajajajaja



Pero con cerveza o sin ella....


Llegamos al punto más alto.

A partir de aquí...ya sería un continuo baja-baja que te pillo, hasta llegar a Castellar d'Hug. 



Un momento de respiro antes de empezar nuestro descenso, para observar la flora de altura.

¿guapo eh?


Y comenzamos un descenso de verdadero disfrute con unos paisajes como estos y una agradable temperatura.


Como podéis ver...rodar por aquí es un placer reservado solo a unos pocos valientes que se atreven a subir un desnivel inicial de 950 metros en unos 11 km. 



¡ Oooooh que bonitas baquitas!




Oooooh... que bonito torito en mitad de caminito...jajajajaja.


Ahora, a ver quien le dice que se aparte... jajajajaja. 



Pero no hay nada que con un agradable: ¡ POR FAVOR ! y un educado: ¡ GRACIAS SEÑORAS! no se consiga continuar nuestro camino sin percances...jajajaja. 



Lugares como este hacen que te olvides del esfuerzo y comiences a disfrutar de unas impresionantes bajadas. 

Por supuesto...hay que ir con mucho cuidado porque la hierva te puede ocultar algún que otro socavón o piedras ocultas...pero en general...se disfruta...y mucho. 



Nos esperaban más vacas por el camino... pero todas fueron muy amables y respetuosas con nosotros. Es lo que tiene haber estudiado en la misma universidad.


También hay tramos con piedras para "dar y regalar" en donde se pone a prueba no solo la suspensión de nuestras bicis, sino también la de los brazos y las piernas. Además de estar muy alerta para hacer la trazada correcta si no quieres ir al suelo. 



Poco antes de llegar a Castellar, el paisaje nos regalaba numerosos saltos de agua como este, que aún alegraban más la vista y el recorrido. 


Y tras un descenso lleno de hermosos paisajes, terreno digno para cualquier amante de la btt que se precie y con los brazos cansados de tanta piedra...



Comenzamos a ver Castellar en las alturas.

Con unas nubes que ya amenazaban lluvia en poco tiempo. 


Y como aún nos quedaba una buena subidita por carretera, decidimos no entretenernos en el nacimiento del Llobregat y continuamos la marcha.



Saludamos al famoso perro pastor.



Y mientras comenzamos a disfrutar de su famosa ternera con bolet....
comenzó una tormenta de verano que nos tuvo "encerrados" en el restaurante y alimentándonos hasta que amainó un poco.



Pero la lluvia nos respetó... al menos para animarnos a salir de nuestro escondite...jajajaja.


Y cuando ya no podíamos comer más...y paró de llover....salimos pitando dirección Capdevànol. 

La tormenta nos hizo desistir de pasar por el monasterio de Momtgrony. Otra vez será. 


Pero la lluvia no iba a permitir que nos fuéramos de "rositas". Así que en cuanto comenzamos a bajar, nos regó un poquito, no mucho, pero lo suficiente para quitarnos la mandra que teníamos después de comer y también para hacer que la temperatura descendiera unos grados.



Tanto...que Jordi y Silvio no dudaron en abrigarse y ponerse el chubasquero.



Mientras el valeroso Tío la Vara bajaba así de fresquito...jajajajaja.

Es lo que tiene estar bien alimentado y rodeado  de un protector natural, ecológico y sano al que yo llamo "reservas de energía" y otros envidiosos llaman "grasa corporal".



La tormenta se fue apartando de nuestra ruta.
Y aunque se sentía tronar por la montaña, a nosotros apenas nos llegaba la lluvia.

De hecho...ya estábamos mojados.


Sea como fuera, mojados o no... la verdad es que el paisaje era digno de ver y de disfrutar.

Y el hecho de que fuera bajada casi todo el tramo hasta llegar a la estación de Capdevànol, te permitía observar el entorno si pedalear.



Llegada a la estación y final de la ruta.

Una nueva aventura Bikestera en la que además de poner a tono nuestras piernas, hemos podido disfruta de una jornada plena de btt.

¡HASTA LA PRÓXIMA!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Envía tus comentarios:

BLOGS AMIGOS